Cine: La vida de Brian

Si bien hace poco dedicamos un post a hablar de la película "Amanece que no es poco", una obra maestra del cine español que recientemente cumplió la friolera de 20 años. Hoy nos dedicaremos a rememorar otra joya del cine, británico esta vez, que también cumple años: nada menos que 30; "La vida de Brian", del grupo humorístico Monthy Phyton.

Esta película, se convierte desde su primer minuto en una disparatada sátira de la vida de Jesucristo, a través de su protagonista Brian, quien llevará una vida paralela a la del mismo Jesús y con quien será confundido en más de una ocasión.

Pero antes de nada, conviene recordar a este grupo de disparatados cómicos formado por 5 británicos y un estadounidense que saltó a la fama con un show humorístico de disparatados cortos conocido como "Fliying Circus". Si alguien tiene curiosidad por alguno de ellos, recomiendo ver el siguiente corto, "Bicycle Repairman".

"La vida de Brian" constituye sin duda su más famoso largometraje junto con "Los caballeros de la mesa cuadrada", una parodia al Rey Arturo y su corte de Camelot, en la cual podemos ir viendo como la vida del joven Brian se entrecruza una y otra vez con la de Jesucristo dando lugar a una sucesión de disparatados acontecimientos.

Destacaría sin duda el inicio de la película en la que los Reyes Magos confunden la barraca donde acaba de nacer Brian con el portal de Belén dando lugar a la conversación más surrealista de la obra, con un disparatado pero no por ello menos genial papel de madre de Brian, Mandy, interpretado por Terry Jones.

Genial también resulta la escena de la lapidación donde todos los asistentes son mujeres con barbas postizas en un acto en el que está prohibida su presencia y los hilarantes diálogos con los vendedores de piedras. -¿Mamá me compras una plana?. -Bueno, serán dos con punta, una plana y una bolsa de gravilla.

Resulta dificil describir los continuos gags, críticas y comentarios irónicos característicos de los Monty Phyton, por tanto recomiendo dedicar una tarde de domingo a esta película, por la que si bien es cierto han pasado los años y que tiene algunas escenas un tanto pobres, no deja de ser una excelente sátira con algunas escenas memorables que han dejado huella. Es bastante posible que incluso aquellos que no han visto la película sepan tararear la melodía con la que finaliza "Always look at the bright side of the life" y que se ha convertido todo un himno al optimismo.